A pesar del reciente asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, el senador Félix Salgado Macedonio negó que Guerrero sea un estado fallido y aseguró que aún existe gobernabilidad.
Salgado defendió a su hija, la gobernadora Evelyn Salgado, señalando que está trabajando activamente en la entidad, y culpó a las Fiscalías de no investigar ni detener a los responsables de la creciente inseguridad que sacude al estado.
El asesinato del alcalde, sumado a la crisis de violencia, pone en duda el control del gobierno en Guerrero.
