Este miércoles marcó un momento significativo en la vida política de Jesús Luna Morales, líder campesino reconocido en Michoacán, quien formalizó su renuncia al Partido Revolucionario Institucional (PRI) en las oficinas del Comité Estatal. Esta decisión marca el fin de una carrera de más de tres décadas de militancia priista y un compromiso constante con las causas del campo en la región.
A lo largo de su trayectoria dentro del PRI, Luna Morales centró sus esfuerzos en trabajar a favor del desarrollo y bienestar de los campesinos michoacanos. Su participación en la Confederación Nacional Campesina (CNC) le permitió ocupar diversos cargos relacionados con las problemáticas y necesidades de este sector vital para la economía y la sociedad de la región.
El líder campesino se destacó por su labor en campos y territorios, abogando por mejoras en las condiciones de vida y trabajo de los agricultores y sus familias. Su renuncia al PRI deja un vacío en las filas del partido y en la labor de representación de los intereses campesinos en la política local.
Es relevante señalar que a pesar de su amplia trayectoria y dedicación al PRI, a Luna Morales le fueron negadas oportunidades en más de una ocasión para competir en elecciones para cargos de diputación. Este obstáculo, en muchas ocasiones, fue atribuido a los malos manejos de los dirigentes dentro de su partido, pero fundamentalmente por no pertenecer al grupo político en turno, en donde valoraron más los amiguismos que el trabajo y el contacto directo con la militancia.
Por cuestiones de este tupo, se puede entender prácticamente la debacle del Partido Revolucionario Institucional.