Reportan impactos menores en la franja aguacatera de Michoacán debido a la ola de calor y las lluvias incipientes, según informó Armando López Orduña, representante de la Asociación de Productores Exportadores de Aguacate de México (APEAM). Algunos productores han tenido que recurrir a sistemas de riego de auxilio para sus huertos, mientras que otros que dependen del riego de temporal no tienen esa posibilidad.
López Orduña destacó que las zonas más afectadas por las altas temperaturas y el estrés en los árboles y la fruta son Apatzingán y Ziracuaretiro. Aunque no mencionó pérdidas económicas, afirmó que todavía están sorteando la situación.
Explicó que se están realizando cortes de fruta “negra” o seca para evitar que afecte la calidad y la maduración del producto en desarrollo. Respecto a la presunta responsabilidad del cultivo de aguacate en el cambio de uso de suelo forestal y su impacto en el medio ambiente y el clima, López Orduña aseguró que cumplen con la normatividad federal y los lineamientos del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Afirmó que en la APEAM no están a favor de la deforestación.
La APEAM se encuentra en periodo de transición entre el final del programa de exportación 2022-2023 hacia Estados Unidos y el inicio de la nueva temporada 2023-2024. Se estima que se enviarán más de un millón de toneladas de aguacate al país vecino. En Michoacán y Jalisco, la APEAM cuenta con la presencia de 35 mil productores y 89 empacadoras, y se tienen certificadas 170 mil hectáreas para la exportación.