Morelia, Mich., 20/05/2022 | Esta mañana, la organización “Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad” dan a conocer su investigación contra una funcionaria de PEMEX, de nombre Carmelina Esquer, quien además es hija del secretario particular de AMLO, también estrenó casa en Houston, a 15 minutos de distancia de la presunta residencia de José Ramón López Beltrán.
Aquí dejamos los 10 puntos más importantes de la investigación:
Carmelina Esquer es hija de Alejandro Esquer, secretario particular y operador financiero del presidente López Obrador, el mismo que es acusado de encabezar la “Operación Carrusel”, revelada en video por MXvsCORRUPCION en diciembre de 2021.
Sin ningún tipo de experiencia en el sector petrolero y energético, la hija de Esquer fue nombrada en julio de 2019 directora de Pemex Procurement International (PPI), la filial en Houston encargada de compras internacionales de Pemex, pues antes de trabajar en Pemex, Carmelina era empleada la empresa de mensajería DHL y luego fue asesora del PT en el Senado; ningún trabajo previo tiene que ver con el sector petrolero.
Como directora de PPI, Carmelina gana el equivalente a 270 mil pesos mensuales netos, más del doble del sueldo del presidente López Obrador.
En diciembre de 2020, la hija de Esquer compró una casa en Houston, valuada comercialmente en más de 400 mil dólares, a 15 minutos de distancia de la casa del hijo mayor de AMLO.
Casi a la par de que estrenaba casa, se ordenó el cambio de las oficinas de PPI a una ubicación más cercana a su domicilio en Houston.
PPI, dirigida por Carmelina, tiene entre sus tareas negociar desde Houston con grandes proveedoras multinacionales de Pemex.
MXvsCORRUPCION solicitó vía transparencia acceso a la nómina y a los contratos asignados por PPI, pero Pemex se negó a proporcionar cualquier dato de su filial en Texas.
Entre los contratos ocultos están los asignados a Vitol, compañía involucrada en el pago de sobornos en Pemex entre 2015 y 2020, y con Baker Hughes, la cual estuvo en el centro de la polémica por “La Casa Gris”.
@MXvsCORRUPCION identificó que PPI intervino en al menos un procedimiento que derivó en un contrato a Baker Hughes, el cual se elevó de 66 millones a 343 millones de dólares en la actual administración federal.
MXvsCORRUPCION también comprobó que PPI intervino en la adquisición de 720 mil toneladas de etano para plantas de Pemex, en una asignación por 237 millones de dólares con vigencia de 2018 a 2020.
El argumento de Pemex para negar acceso a los contratos de PPI es que es una filial creada en Estados Unidos, que se rige por las leyes de aquel país y, por tanto, no está obligada a transparentar su información.
MXvsCORRUPCION comprobó que en años anteriores algunos contratos u órdenes de compra suscritos por PPI sí eran públicos; no había el “velo corporativo” actual.
En 2019, el presidente López Obrador se refirió así a la filial de Pemex en Houston: “Estamos limpiando esa empresa, porque es la que compra los combustibles, es la que tiene la venta, también, del petróleo en el extranjero (…) Se está limpiando de malos manejos”.